<div>Fotografía original del despegue de un Globo Aerostático. Del estudio A.Esplugas, Barcelona. Feria Universal 1888.<br>Nombre original de la obra: A. Esplugas, Plaza del Teatro, 7. Fotografía de personas en globo aerostático. Para sobrevolar Barcelona a 300 metros de altura, en la feria universal de 1999.<br>La empresa concesionaria era la francesa Godard,<br>Formato de fotografía: 16 x 11cm.<br><br><strong>Antonio Esplugas Puig (1852-1929) fué uno de los fotógrafos españoles más importantes del siglo XIX y comienzos del XX: </strong>hijo del pintor retratista Antoni Esplugas Gual. Nació en Barcelona y con poco más de veinte años, abrió un estudio fotográfico en la plaza del Teatro, en sintonía con la costumbre del siglo XIX en la que florecieron numerosos gabinetes fotográficos en las capitales de provincia y ciudades grandes. Unos años después, en 1881, recibió la cruz de la Orden de Isabel la Católica por conseguir una instantánea en un cuarto de segundo, algo magistral para aquella época. Un año después, se le concedió el título de Fotógrafo de la Casa Real.<br> <br>Durante la Exposición de Barcelona de 1888 <strong>obtuvo la exclusiva para fotografíar a las personas que subían a un globo cautivo</strong> (un globo aerostático que está sostenido por uno o más cable al suelo), una atracción que ofrecía vistas de la ciudad a 280 metros de altura. También desde allí realizó importantes fotografías aéreas de Barcelona (las más antiguas tomadas desde el aire conservadas en España), por las que recibió la medalla de plata de la Exposición. En nuestra colección tenemos un par de estas señaladas imágenes.<br><br>En paralelo al trabajo de su gabinete - que más tarde y dado su gran prestigio se trasladó al céntrico Paseo de Gracia-, <strong>Antonio Esplugas viajó por toda España retratando a los artistas de la época: cantantes, bailarinas, toreros, deportistas, políticos, cabareteras, etc</strong>. Como era habitual, estas imágenes se comercializaban después en formato de tarjetas y postales. Esplugas desarrolló un interés muy dispar a lo largo de su carrera, dado que se le reconoce tanto por ser uno de los precursores de las fotografías de desnudos como también por tomar instantáneas de tipo informativo muy próximas al fotoperiodismo.<br>Se estima que a finales del siglo XIX <strong>su ingente producción podía alcanzar las 50.000 piezas al año</strong>.</div>