<div>Este tipo de cámaras de plástico, fabricada desde comienzos de los '60s por la Traid Corporation, se vendía puerta a puerta a precios que variaban desde los $150 a los $300 (equivalentes a $3142 en el año 2017) y está considerado como la mayor venta engañosa de cámaras de la historia de los Estados Unidos. Su público objetivo eran las amas de casa de la época y se vendía como una cámara alternativa, de uso más sencillo que las complicadas cámaras tradicionales. Esta cámara grande y pesada, tenía una serie de características innovadoras, entre las que estaban el flash electrónico incorporado, con baterías recargables y otros detalles electrónicos, como el avance de película motorizado. Esta cámara se consideró una revolución en la época, pero debido a su alto precio y su aparente pobre calidad óptica, se convirtió en un fiasco hasta el final de su comercialización en 1971.</div>