Patrice Barraud, en su libro "Le génie photographique d'Angers", dedica páginas muy interesantes a la vida y obra de Lucien Baudry, un relojero angevino, que hizo a los isógrafos uno por uno, de manera muy tradicional. La meticulosidad del proceso de fabricación nunca permitió alcanzar una producción significativa. Cada dispositivo es único.